Pues sí, resulta que esta semana me he dado cuenta de que NO SOLO YO tengo (o tenía) PÁNICO al amor. Y no digo esto acordándome de los casos que leí en Internet sobre gente que confesaba lo mismo, sino que lo afirmo en base a lo que estoy observando a mi alrededor, porque cada vez que le digo a alguien -A ver si tenemos suerte, y te sale novio/a – o -A ver si te enamoras y se te quitan todas las tonterías- la gente parece huir despavorida. Estoy segura de que lo del “coñazovirus” no les espantó ni la mitad; y también estoy convencida de que si les llamas Hijos de Puta, no se enfadan tanto como si les deseas novio/a, ni te sueltan una y otra vez legendarias frases como -¡Quita, quita! Estoy muy bien como estoy- o -¡¡Uuuuhhh!¡Ni de coña! ¡Lagarto, lagarto!-, jajajajajajajaja.
Me hace gracia que en vez de pensar en lo bien que van a sentirse, surja dentro de ellos un ARREBATO en el que A TROPEL irrumpen todos los cambios y las revoluciones que supondría en sus vidas semejante acontecimiento llamado AMOR.
Querido Amor:
Ten cuidado cuando salgas a pasear. Hay
mucha gente dispuesta a volarte la cabeza si
te cuelas en sus vidas.
Siempre tuya, Poética Madrid.